Tocar la guitarra: cómo elegir un primer instrumento
Aprender a tocar la guitarra resulta una aventura apasionante pero también un viaje difícil que exige esfuerzo y dedicación. Son muchos los que se desaniman cuando empiezan al comprobar que la guitarra española no constituye un instrumento tan sencillo como imaginaban y acaban abandonándola en un rincón. Por eso, a la hora de comprar una, se debe elegir el instrumento más adecuado a las necesidades para que el inicio del aprendizaje se torne lo más fluido posible.
En primer lugar se debe decidir qué tipo de música para guitarra se desea tocar. No es lo mismo querer convertirse en una estrella del rock con una poderosa guitarra eléctrica que soñar con erigirse como un virtuoso de la guitarra clásica. Pero, en caso de no tener claro un estilo, muchos opinan que se debe comenzar a aprender la técnica con esta última.
Al componerse de cuerdas de nailon en vez de acero, requiere de menos fuerza en la mano cuando se presionan. Además, cuentan con un diapasón más ancho que facilita que los principiantes toquen acordes más limpios a la vez que adquieren destreza en los dedos.
En cualquier caso, se debe concretar el presupuesto para una primera guitarra. Se ha de desconfiar de aquellas excesivamente baratas, con un precio inferior a los 150 euros, aunque tampoco se recomienda optar por instrumentos muy caros.
Lo mejor es ir directamente a una tienda de música donde se puedan recibir consejos y probar personalmente las guitarras. Asimismo, se debe pedir al dependiente que interprete una misma pieza en diferentes instrumentos, de modo que el instinto y el oído ayuden a escoger la que posea el sonido más agradable.
Se recomienda cogerla entre los brazos y sentir las curvas y el tacto de sus cuerdas: si se experimenta comodidad, entonces esa será una inestimable compañera de aventuras.